La forma válida de escribir esta palabra es cercar. En cambio, la grafía sercar es una incorrección que se aconseja evitar.
Cercar es un verbo, proviene del latín circāre, que significa ‘rodear’. Se emplea en referencia a la acción de rodear un lugar con una cerca, una valla o una tapia, para protegerlo del exterior o delimitarlo.
Por ejemplo:
- El ganadero quiere cercar su propiedad para evitar que las reses se le pierdan.
- Convenía cercar el jardín, no sea que se meta un ladrón.
Cercar también significa, en el ámbito militar, sitiar una ciudad, plaza o fortaleza a fin de lograr su rendición.
Por ejemplo:
- Había que cercar Lisboa para derrotar a los moros.
- Un ejército de diez mil hombres marchaba para cercar el castillo.
Cercar, asimismo, se usa en referencia a una muchedumbre que rodea a alguien o algo.
Por ejemplo:
- Los reporteros cercaron a los diputados y los fatigaron con preguntas.
- El profesor, cercado por sus alumnos, no tuvo problemas para darse a entender.
El barbarismo ortográfico sercar es probablemente consecuencia de la indistinción en América y algunas regiones de España entre los fonemas s y c, que se pronuncian exactamente igual. Lo aconsejable es evitarlo.