Rechazo y rechace son palabras válidas, sin embargo, poseen algunas diferencias en su significado. Rechazo se refiere a la acción y efecto de rechazar a alguien o algo, al rebote de un cuerpo al chocar con otro. Rechace, aunque también se refiere a la acción de rechazar, es un término únicamente empleado en el ámbito deportivo.
Cuándo usar rechazo
Rechazo es un sustantivo masculino; hace referencia a la acción y efecto de rechazar, al movimiento de rebote de un cuerpo al chocar con otro, o, en medicina, al fenómeno inmunológico a causa del cual un organismo reconoce como extraño a un órgano o tejido procedente de otro.
Por ejemplo:
- Siento un rechazo tremendo por el uso de fertilizantes en la agricultura.
- Marta mostró su rechazo a Juan.
- El rechazo del defensa evitó una oportunidad clara para el equipo rival.
- El paciente tiene 50% de probabilidades de rechazo al órgano.
Cuándo usar rechace
Rechace es un sustantivo masculino; es la acción rechazar algo, se usa específicamente en el ámbito deportivo en referencia al acto de repeler o rechazar un balón o una pelota. Su terminación en -e es típica de otras expresiones derivadas del lenguaje deportivo o coloquial, como despeje, alucine o desmadre. No es adecuado su uso fuera del ámbito deportivo.
Por ejemplo:
- El rechace del travesaño acabó en el costado derecho, donde remató de volea el delantero.
- El portero sacó el primer remate, pero en el rechace el jugador mandó el balón al fondo de la red.