Sepa es el verbo saber conjugado en diferentes formas verbales, mientras que cepa es un sustantivo que se refiere al tronco de la vid, al origen de una familia o linaje, o a un grupo de organismos de ascendencia común.
Tanto sepa como cepa son consideradas palabras homófonas en la mayor parte del mundo hispanohablante, donde no existe diferencie fonética alguna entre la pronunciación de la de la s y de la c antes de la e y la i. Mientras que en España, donde sí se pronuncian de manera diferente, son tenidas como palabras parónimas.
Cuándo usar sepa
Sepa es el verbo saber conjugado en primera (yo), segunda (usted) y tercera (él, ella) persona de singular de presente en modo subjuntivo, así como en segunda persona de imperativo. Puede usarse con varios sentidos: tener conocimiento o estar enterado de algo, estar instruido en determinada materia, tener habilidad para hacer una cosa, estar seguro de un hecho futuro, ser muy listo o sagaz o, tratándose de un alimento, tener un sabor. La palabra, como tal, proviene del latín sapĕre.
Por ejemplo:
- Sin que él sepa, aparece por detrás y dale un susto.
- Aunque yo no sepa mucho de informática, puedo hacer ese trabajo.
- No me importa que este batido no sepa bien, sino que me alimente.
Vea también Sé, Sabo o Sepo.
Cuándo usar cepa
Cepa es un sustantivo femenino; se puede referir al tronco de la vid del cual nacen los sarmientos y, por extensión, a toda la planta; puede hacer referencia también al tronco u origen de una familia o, en el ámbito de la biología, cepa puede aludir al grupo de organismos cuya ascendencia es común, como las bacterias, los hongos o los virus. Cepa, como tal, deriva del sustantivo cepo, que a su vez proviene del latín cippus, que significa ‘estaca’ o ‘cipo’.
Por ejemplo:
- Este vino es de la cepa syrah, cultivada en el valle del Ródano.
- Descubrieron una cepa de E. coli con resistencia a antibióticos.
- Picasso era un artista de pura cepa.